Regularmente, uno de los requisitos principales para solicitar un crédito es tener uno o más avales… ¿Pero qué es un aval? Legalmente, un aval es una persona física o moral que asegura que la deuda será saldada.
Esto quiere decir que si la persona o empresa que contrajo la deuda no paga, la institución que dio el préstamo tiene el derecho de exigir al aval que cubra la deuda e incluso puede ejecutar acción legal en contra de esta. Al fungir como aval la deuda pasa a tu nombre y tienes la obligación de pagarla aunque no hayas recibido ni gastado ese dinero.
¿Por qué se solicita un aval?
Para que una institución financiera otorgue un crédito primero lleva a cabo un estudio socioeconómico a la persona que lo solicita, esto con el fin de verificar que podrá pagar el monto del dinero solicitado y que exista la garantía de que cumplirá con el contrato.
En caso de que se detecte una insuficiencia económica o falta de patrimonio como garantía del crédito, entonces solicita un aval para tener una mayor certeza de pago en dado caso de que la persona que solicita el crédito no cumpla.
¿Te pueden embargar por ser aval?
La posibilidad de un embargo es muy probable. La ley ampara el pago de la deuda e incluso puede llegarse a un embargo en contra del aval, en caso de que este carezca de recursos para enfrentar sus obligaciones se procede a retener sus bienes.
Una vez que la deuda ha sido liquidada, la persona que fungió como aval puede tomar acciones legales contra el deudor, sin embargo, implica un proceso que no garantiza el pago correspondiente.
De acuerdo con un sondeo realizado por el comparador de servicios financieros Coru.com y la encuestadora Brad.Feebbo, el 29.4 % de la población mexicana tiene una nota mala en el Buró de Crédito por ser aval de un conocido.
Tipos de aval
Existen diferentes clasificaciones en materia de aval, siendo las principales las siguientes:
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Aval económico: garantiza compromisos relacionados con entregas pactadas de dinero o bienes en contraprestación por una venta o servicio realizado.
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Aval técnico: garantiza compromisos de ejecutar trabajos o prestar servicios según los términos comprometidos.
Consecuencias de ceder
Ser aval es una responsabilidad que debe pensarse dos veces, ya que además de la responsabilidad financiera que implica, también se encuentran factores como el valor afectivo que se tiene con la persona que le pidió ser su aval: puede ser un familiar o una amistad, por ello es importante que, antes de aceptar evalúe algunos factores:
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Conozca todo lo posible sola la persona que le pida ser su aval, verifique que sea responsable y formal.
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Pregunte el tipo de crédito que desea contratar. Tome en cuenta que la deuda podría llegar a ser suya en caso de no pago.
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Asegúrese de que los ingresos de las personas que desean el crédito sean estables.
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Como aval, ¿tiene respaldo económico? Debe estar preparado en caso de que su avalado necesite ayuda con su préstamo.
Otra consecuencia negativa, en caso de impago por parte del deudor y el aval, es que se reporta ante el buró crediticio para ambas partes.
¿Se puede dejar de ser aval?
Existe una mínima posibilidad de que esto suceda, sin embargo, la institución financiera que otorgó el préstamo es la única figura autorizada para aprobar dicha acción.
FUENTES
https://www.condusef.gob.mx/Revista/PDF-s/244/aval.pdf
https://www.edufinet.com/inicio/avales/modalidades/que-tipos-de-avales-existen
